-
Visitar Arezzo
Una de las mayores ciudades etruscas y una punto romano estrategico
Arezzo surge sobre una colina en la Toscana oriental. Tal y como testimonia la arquitectura misma, la ciudad se vanagloria de un origen muy antiguo que la hizo ser una de las mayores ciudades etruscas y después una ciudad romana estratégica.
La parte más elevada de la ciudad conserva un marcado aspecto medieval, y está dominada por la Catedral y la Fortaleza de los Médicis. La Catedral presenta un aspecto de rasgos góticos y conserva obras de arte de gran valor, entre las que cabe destacar la Magdalena de Piero della Francesca y las vidrieras historiadas de Guillaume de Marcillat.
La Piazza Grande se encuentra en el centro de la ciudad, y despliega una auténtica antología de estilos; el penúltimo sábado de junio y el primer domingo de septiembre se convierte en el escenario de la Giostra del Saracino, un torneo caballeresco de origen medieval. La misma plaza y gran parte del casco viejo acogen la Feria de Antigüedades todos los primeros domingos del mes y el sábado precedente.
La capilla de la Basílica di San Francesco acoge el extraordinario ciclo de pinturas al fresco de la Leyenda de la Vera Cruz de Piero della Francesca, uno de los testimonios más altos de la pintura renacentista italiana. La cruz que pintó Cimabue, obra juvenil del artista, se conserva en la iglesia de San Domenico, construcción simple de una sola nave. Otras muchas iglesias y edificios testimonian la cultura de Arezzo y su importancia en las distintas épocas de la historia con su belleza y originalidad estilísticas.